-Ven, ya va siendo hora (me dice)
-Sé que estás agotada (él, me lo nota)
-Deberías relajarte y quedarte mañana más tiempo aquí conmigo (él, me aconseja)
-Sé que no puedes porque tienes muchas responsabilidades (él, me entiende)
-Antes pasábamos más tiempo juntos, aunque ya sabes que siempre que quieras me tendrás para sostener tus sueños (él, me lo recuerda constantemente)
-Esta noche no te quedes despierta hasta tan tarde, que tienes cosas muy importantes para el fin de semana... y sé que me necesitas (él, sabe lo que me conviene)
-Pero vente ya, empieza a hacer frio, acurrúcate aquí conmigo, tengo algo que te gusta mucho y que te va a mantener caliente (él, me provoca)
Apago el ordenador y le digo... ya voy Amor,
¿como puedo resistirme a semejante ofrecimiento?
¡¡¡ coño,,,,, si es que tengo un colchón que no me lo merezco ¡¡¡
-
6 comentarios on "EL"
Y como el colchón propio... ninguno.
jajaja... yo ya iba bajando despacito linea a linea a ver por donde salias... que rabia que sea el colchón no? aunque como dice Tesa, propio y cómodo, donde descansen tus sueños y repongas las ilusiones al despertar... que más quieres? y ahora puedes decir... pos un hombre encima del colchón!
Un beso... y ganas de veros!.
Joder!! Que suerte. A mi el mío me echa de su vera tempranito. ¡Se pone de un humor! Que si vago, que si te crees que no tengo nada mejor que hacer que estar aquí contigo, que ya va siendo hora de que te levantes... Este es como los niños, caprichoso, eso si... se porta bien cuando hay visita. Más que nada para dejarme mal.
¡Chula! Se te han acabado las excusas... ¡cuentanos!
Jajajajajaja ¡Qué mal que estoy! ¡Pues no había pensado yo que.....! ¡Ay Dios mío!
Un beso mientras hago las maletas pa Menorca... por fin! 3 meses hacía ya... Te recuerdo Amanda...
Publicar un comentario